El transgresor look de la Copa. Los cabellos brillan por su ausencia en la Copa América de Venezuela, ya que nunca se vieron en la competición tantas cabezas peladas. En uno de los partidos de la Copa, el Venezuela-Uruguay de la primera fase, se llegaron a contar ocho testas ralas en la selección "vinotinto", un desfile de monjes budistas que llenó el estadio de misticismo, tanto que pareció que se había pactado el empate a cero.
Hay cabezas que deslumbran con su brillo de lisas que están, como la del argentino Sebastián "Brujita" Verón, la del venezolano José Manuel Rey o la del chileno Humberto "Chupete" Suazo, un aspecto que se repite incluso en el colectivo de los árbitros, como el paraguayo Carlos Torres, émulo del famoso italiano Pierluigi Collina, ya retirado. Afeitados al rape proliferan en todas las selecciones, sobre todo entre los debutantes en la Copa, ya que tal parece que el que se estrena en este torneo debe lucir el coco liso.
También en el Mundial de Alemania 2006 abundaron los "pelados", en una confirmación de que la tendencia se ha hecho moda para disfrute de los peluqueros, ya que para mantener ese corte hay que acudir a la navaja muy a menudo.
El desfile de peinados de Venezuela 2007 presenta algún que otro "rasta" o "afro", colas de caballo, coletas y trencitas, y, por supuesto, un sinfín de jugadores que se sujetan los cabellos con las cintas que hicieron populares los italianos.
Tal vez el "rasta" más espectacular ha sido el del medio estadounidense Kyle Beckerman, de cuya cabeza pende un espeso conglomerado de tirabuzones que tal parece que llevara colgado un pulpo de largos tentáculos.
El brasileño Vagner Love y el colombiano Hugo Rodallega exhibieron trencitas azuladas y negras, pero no pudieron retar en originalidad al argentino Rodrigo Palacio, de cuyo cabello ralo surge una estilizada coleta trenzada parecida a un tentáculo de calamar.
Pelos teñidos o con mechas rubias, como los del delantero mexicano Adolfo "Bofo" Bautista, el uruguayo Fabián Estoyanoff o la larga cabellera del chileno Jorge Valdivia, se emparejan con la cinta azul del mexicano Gerardo Torrado o el pañuelo negro del mexicano Rafael Márquez.
Por cierto, el defensa central del Barcelona lidera el grupo de las largas coletas, en el que se encuentran los paraguayos Salvador Cabañas y Enrique Vera, el colombiano Mario Alberto Yepes y el uruguayo Cristian Rodríguez.
Ya se sabe que nunca hubo un alboroto de rizos dorados como los del colombiano Carlos Valderrama, una de las figuras históricas de la Copa América, pero en Venezuela 2007 compiten por llevarse el mérito el central argentino Gabriel Milito y el portero mexicano Guillermo "Memo" Ochoa.
Se ven jugadores que tratan de imitar a los famosos, pañuelos negros que sujetan los cabellos o melenas sueltas, como las de Lionel Messi, que se vuelan hacia atrás en las carreras, y cambios singulares como el de Hernán Crespo que pasó de lo mucho a lo poco, con un corte que recortó sus largas guedejas.
Hay un "clon" de Cristiano Ronaldo: el chileno Mark González, con un corte similar, pelillo en punta, al de la estrella portuguesa del Manchester United e incluso un cierto parecido físico y en la forma de jugar, basada en la velocidad, la potencia y la agresividad, cualidades que exhibió poco en la Copa. El portero suplente de Perú George Forysth también mostró un corte a la moda, con los pelos en punta a lo Terminator.
Las cintas de distintos colores siguen de moda a la hora de mantener las largas melenas acomodadas para que no molesten: la llevan los argentinos Fabián Ayala, Milito y Fernando Gago, el uruguayo Pablo García, el colombiano David Ferreira, el mexicano Juan Carlos Cacho y la azul de su compatriota Gerardo Torrado.
Peinados y cortes que se adaptan a lo que está de moda, en una demostración de que hay vida más allá del fútbol, del "calcio" o del "soccer", aunque algunos se resistan a creerlo.

fuente: Libero